Tercer Domingo de Cuaresma: La Sagrada Interrupción

POR KRISANNE VAILLANCOURT MURPHY | 3 de marzo de 2024
Lecturas de hoy
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Si soy honesta, mi imagen típica de Jesús es la de un restaurador. Las historias que resuenan más conmigo son las en que Jesús está sanando, levantando a alguien de la muerte, o calmando el mar. Pero el evangelio de hoy me pide que piense en una imagen decididamente diferente: Jesús el interruptor.

Nada sobre la purificación del templo en el evangelio de Juan es manso. De hecho, Jesús está firmemente formidable: tirando al suelo monedas, volcando las mesas, y haciendo un látigo de cuerdas. Jesús está enfadado, y por buena razón. Aunque no se siente cómodo ni natural imaginar a Jesús tan enojado, la verdad es que a veces él escogió enojarse para interrumpir la injusticia. La corrupción y codicia en el templo durante la Pascua estaban fuera de control; el mercado había ocupado el terreno sagrado y algo drástico tenía que suceder. 

En mi trabajo para abolir a la pena de muerte en los Estados Unidos, cada ejecución es un recordatorio consistente que la muerte y la indiferencia por la vida human están fuera de control. Hace seis semanas, el estado de Alabama mató a Kenny Smith por medio de un gas letal. Fue atroz y chocante. Estaba furiosa ante este acto bárbaro. Comuniqué mi indignación a la prensa: “¡Por Dios! ¡Hemos perdido la cabeza!

La furia de Jesús en el templo – y mi experiencia del Jesús el interruptor – me consuela, como un amigo amarrando su brazo con el mío en solidaridad ante tanta injusticia. Entonces acojo el reto en este texto cuaresmal a recordar a Jesús como un interruptor sagrado.

Si sigo siendo honesta, el camino cuaresmal se beneficiará de un toque de interrupción, añadiendo una dosis apropiada de agitación y gravedad en esta temporada de arrepentimiento y búsqueda interna. El camino hacia la sanación y restauración suele requerirlas.

Entonces quizás es tiempo de considerar cómo y dónde estoy siendo llamada a interrumpir la injusticia y en cuáles maneras necesito recibir un poco de esta interrupción sagrada.

¿Cómo me está interrumpiendo Jesús, llamándome al cambio, en esta temporada de arrepentimiento?
¿Dónde me está invitando Dios a ser un interruptor de injusticia?
¿Qué interrupción sagrada pudiera hacer esta cuaresma?

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