Domingo de Ramos: Quédense Aquí y Permanezcan Despiertos

POR PE. GREG BOYLE, S.J. | 24 de marzo de 2024
Lecturas de hoy
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Tenemos más o menos ocho giras de turistas por día en Homeboy Industries. Somos el programa más grande del planeta cuando se trata de intervención, rehabilitación, y reintegración de ex-pandilleros a la sociedad. La gente viene de todos lados del mundo para visitarnos en nuestra sede en Chinatown, Los Ángeles. Los visitantes ven rivales de pandillas enemigas cocinando croissants juntos en nuestra panadería, comen chilaquiles en nuestro café y observan la eliminación de tatuajes en nuestra clínica. De vez en cuando, paso al lado de estas giras y escucho a nuestros guias ex-pandilleros explicar lo que pasa en nuestro centro. “Tu estiras una mano y millones de manos te responden con apoyo,” dice un guía. Otro dice, “si estás pasándola mal, luchando con algo, no te dicen ‘vete para allá y resuélvelo.’ Están ahí contigo.”

Jesús está pasándola mal en el huerto de Getsemaní cuando dice “`mi alma está muy triste .” Su petición a sus discípulos y a todos nosotros es que nos quedemos allí velando. A quedarnos a su lado. 

Yo dí una charla recientemente en Londres y mientras tomaba el tren hacia el aeropuerto de Heathrow, ví unos letreros parecidos a los que tenemos en los Estados Unidos desde 9/11. “Si ves algo. Dí algo.” Pero en este tren en Inglaterra, el letrero dice “Vélo. Dílo. Resuélvelo.” La explicación debajo dice “Si ves algo, dí algo y nosotros lo resolvemos.” Se siente como una corrección compasiva comparada a la versión estadounidense. A veces no es muy claro lo que estamos viendo, entonces es difícil decir precisamente lo que estamos viendo. Necesitamos resolverlo juntos. 

“Quédense aquí y permanezcan despiertos.” Estamos siendo invitados a encontrarnos el uno con el otro en medio de nuestras angustias y nuestros corazones perturbados. Lo resolvemos. Millones de manos respondiendo. Alli juntos.